Bueno, perdón por el retraso en esta nueva entrada, pero esta última semana ha sido una de las más intensas, complicadas, estresantes y solitarias de mi vida. Os escribo estas líneas por fin ya desde mi casa, con mi conexión a Internet instalada, y con, por fin también, una cama y un sofá (además de cuatro sillas y una mesa donde comer). Os cuento. Justo acabar la orientación me hospedé en la casa de una familia filipina que me ha asesorado con todas las gestiones para realizar el alquiler de la casa y que, por decirlo de alguna manera, me ha salvado la vida. Me han dado casa, comida y sobre todo cariño, que me hacía falta con todo lo que tenía por delante. Así que durante 4 noches he dormido en la habitación de una niña de 6 años, la cual pobre no entendía que hacía un tío de 29 años durmiendo en su cama rodeado de cerca de una veintena de muñecas y de casitas de toda la gama de color rosa que os podáis imaginar. Luego ya desde el pasado lunes empecé a dormir en mi nueva casa (tenéis una foto y la dirección a la derecha, para que no os perdáis si decidís visitar este país y de paso a un servidor; no hay excusa porque tengo una habitación de sobras con cama de matrimonio incluída); y hasta hoy mismo he tenido que dormir en un colchón hinchable con la casa totalmente vacía, ya que no sé porqué razón en Estados Unidos las casas se alquilan sin amueblar. Llevo todo el fin de semana de plena odisea para encontrar algo de muebles, y al final he tenido que invertir un pastón en las camas, aunque el resto de cosas me han salido baratas por dos razones:
1) Wal-Mart: supermercado (y subrayo lo de super) que tiene de TODO. Y pongo en mayúsculas lo de todo (desde una escopeta a plátanos, desde un váter a un armario, desde un gps a unos calcetines negros de ejecutivo. etc., etc., etc.). Eso sí, aunque venden escopetas, balas no, gracias al trabajo del gran Michael Moore en su documental Bowling for Columbine. Pues eso, que allí he podido abastecer mi nueva casa de todo tipo de víveres y de algún tipo de muebles y demás.
2) Yeld and Garage Sales: no sé si alguien ya sabe lo que es, pero se trata de que cada sábado por la mañana muchas familias que se mudan o que quieren cambiar sus muebles venden los usados a un precio muy barato. Y hombre, la verdad es que hay muchas birrias, pero de vez en cuando encuentras una ganga de esas que reúnen las tres características básicas de bueno, bonito y barato. Y así he conseguido un sofá semi-nuevo por tan sólo $50.
En cuanto a las clases, de momento van bastante bien. Ahora mismo estamos con los pronombres personales y con las normas de pronunciación en español (clases de E/LE), mientras que con las clases de hablantes nativos estamos haciendo clases de lectura y escritura equivalentes a un nivel de 3º de Primaria en España, aproximadamente. En cuanto al control de los alumnos, de momento parece que los tengo encarrilados, expecto un grupo un poco más complicado y pasota; ojalá esto se mantenga así. Eso sí, me cuesta entenderles mucho cuando me hablan o me preguntan alguna cosa, porque a mi todavía pésimo nivel de inglés hay que añadir que tienen un acento bastante difícil de captar. Así que ahí estoy yo, diciendo que me repitan las cosas constantemente, pero cada día menos y aprendiendo mejor a entender oralmente a los hablantes de inglés norteamericanos con acento sureño.
Así que nada, parece ser que lo peor ya ha pasado, porque ya tengo mi lugar para trabajar, preparar clases y sobre todo para vivir y relajarme. No obstante, la soledad a veces le pone a uno triste, y como dice el maestro Sabina:
Y algunas veces suelo recostar
mi cabeza en el hombro de la luna
y le hablo de esa amante inoportuna
que se llama soledad.
Nada más gente. Contadme algo de España, ya voy leyendo El País Digital y els telenotícies de TV3, y me acabo de enterar de lo de la enésima tregua de los hijos de puta de ETA. ¡Que se vayan con su circo a tomar por saco! Y como no, también me he enterado de que el Atleti va líder de la liga española... sí, ya sé, sólo llevamos una jornada, pero tenía que decirlo, porque ya conozco a este equipo y luego ya hará de las suyas. Por cierto, removiendo mi pc he encontrado una foto maravillosa que ni en mejores sueños hubiera imaginado, y es Barcelona, la montaña mágina de Montjuic, teñida de rojiblanco durante la celebración de la pasada final de la Copa del Rey (que dicho sea de paso, perdimos). Ahí va eso:
Como se empieza a echar de menos los lugares y la gente.
Saludos familia,
Paco
Qué pasa noi!
ResponderEliminarJejejeje. La casa es tal cual me imaginaba que iba a ser...
Supongo que ya te habrás abastecido de las armas de fuego correspondientes. Un auténtico "american home" debe tener su buena dosis de armamento... aunque, no sé porqué, no te veo empuñando una recortada...
Bueno nen, luego te escribo...
Saludos!
Con la casa sí que te he complacido, pero no así con el coche. Sé que te esperabas algo más largo...
ResponderEliminarJajajajajaja
ResponderEliminarCierto! Yo esperaba un clásico!
Era tu oportunidad tío... Bueno...
"Pacou" (así te deben llamar por ahí, no?),
ResponderEliminarVaya choza te has agenciado... Creo que con la pistolita y el sombrero de sheriff (y por supuesto la estrella...) tienes cubierta la seguridad de tu casa...je je je
P.D.: Te imagino en la "terraza" de la entrada de tu casa... en tejanos, camisa de cuadros sin mangas... sentado en una silla y tus pies acamperados apoyados en la barandilla... sombrerito de paja calado a la altura de los ojos y una ramita en la boca... Cervecita en la mesa y country sonando de fondo... Vaya estampa!!! jou jou jou!!!!
Disfrutá, disfrutá amigo!!!
David de Segur.
Jeje, me gusta todo lo de tu descripción, excepto lo de la camisa sin mangas.
ResponderEliminar¡Un abrazo amigo!
PD: Estoy nutriéndome de "vuestra" literatura yanki. Ahora estoy con "Las uvas de la ira"...